Los métodos de ADR ofrecen
varias ventajas, entre las que se incluyen:
- Un procedimiento único.
Por medio de estos métodos, las partes pueden convenir en resolver
mediante un procedimiento único una controversia relativa a derechos de
propiedad intelectual protegidos en distintos países, evitando los gastos
y la complejidad de los litigios multijurisdiccionales y el riesgo de
obtener resultados divergentes.
- Autonomía de las partes.
Debido a su carácter privado, estos métodos permiten a las partes ejercer
un mayor control sobre el modo en que se soluciona su controversia que si
recurrieran a los tribunales. A diferencia de un litigio ante los
tribunales, las partes pueden seleccionar a los expertos que consideren
más apropiados para dictar una resolución sobre su controversia. Asimismo,
pueden escoger el derecho aplicable, el lugar y el idioma en que se llevarán
a cabo los procedimientos de ADR. La mayor autonomía de las partes puede
traducirse asimismo en un proceso más rápido y en un ahorro de costas, ya
que las partes pueden diseñar procesos más eficaces para solucionar sus
controversias.
- Neutralidad.
Los métodos de ADR ofrecen una alternativa a los tribunales a cualquiera
de las partes, evitando así que sólo una de ellas esté familiarizada con
el idioma, derecho aplicable y los procedimientos locales.
- Confidencialidad.
Los procedimientos de ADR son de carácter privado. Por consiguiente, las
partes pueden convenir que los procedimientos y los resultados derivados
de los mismos sean confidenciales. Esto les permite centrarse en el fondo
de la controversia sin preocuparse por sus repercusiones públicas, lo que
puede ser particularmente importante cuando están en juego reputaciones y
secretos comerciales.
Pese a su complejidad,
existen obviamente circunstancias en que es preferible recurrir a un pleito
ante los tribunales. Por ejemplo, el carácter consensual de los métodos de ADR
los hacen menos aconsejable cuando una de las dos partes se muestra poco dispuesta
a colaborar, lo que puede producirse en el contexto de una infracción
extracontractual. Asimismo, podrá preferirse un litigio ante los tribunales
cuando, a fin de clarificar sus derechos, una de las partes desea establecer un
precedente jurídico público, en lugar de obtener un laudo cuyo alcance se
limite a la relación entre las partes.
Fuente. Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI)
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